Cuando la paciente presenta áreas de adiposidad que desea reducir o modelar y al mismo tiempo quiere añadir o recuperar volumen en sus mamas, o cuando la paciente no desea un implante de silicona, se realiza un procedimiento de liposucción seguido de lipotransferencia o injerto autólogo de grasa en los senos. Así, el tejido graso removido es llevado a ésta área para aumentar el volumen y dar mejor forma, otorgando un aumento discreto y de apariencia natural.
El procedimiento se realiza con anestesia local, asistida por sedación, para que la paciente esté dormida y sin dolor durante toda la intervención. La duración es de 2 a 3 horas aproximadamente. Es una cirugía ambulatoria y permite la reinserción laboral en pocos días. Como en cualquier procedimiento quirúrgico, aunque sean mínimas, existe la posibilidad de infección, sangrado y complicaciones con la anestesia. Los hematomas y la inflamación desaparecen en algunas semanas.
Es necesario el uso de una faja en las áreas de lipoaspiración durante el mes posterior a la cirugía para dar contención, reducir la inflamación y que la piel se adapte a la nueva figura. El resultado final alcanzado con el procedimiento se verá a los seis meses aproximadamente. Es frecuente realizar una nueva lipotransferencia en el futuro, ya que para alcanzar la apariencia deseada es común que se requieran más de un procedimiento.